(@EFE)
No deja de sorprenderme el cinismo y la doble moral con la que se manejan los dirigentes del Partido Popular. Actitud a la que, dicho sea de paso, nos tienen muy bien acostumbrados. Desde que el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz ordenó el pasado 1 de julio la entrada y registro en la sede de la SGAE y la detención de varios de sus directivos, incluido su presidente ejecutivo, Eduardo Bautista, el PP se volvió un poco más vocinglero de lo normal y, aplicándose al refrán de "a río revuelto, ganancia de pescadores", dio por sentado que la culpabilidad de los imputados era evidente y propuso que, para evitar futuros desmanes, lo mejor era suprimir el canon digital, hacer desaparecer la Sociedad de Autores, crear una agencia pública de control y otras muchas medidas más, ancladas todas ellas en la demagogia, habiendo como hay un Código Penal aplicable a los delitos que investiga la Audiencia Nacional.
El problema es que a Rajoy y a los suyos el recientísimo auto del magistrado José Flors, que sienta a Francisco Camps en el banquillo y le impone una fianza de 55.000 euros, los ha cogido con el mazo dando pero poco despiertos. Y ahora, donde dije digo, digo Diego y pelillos a la mar. Porque lo suyo sería dar por culpable al presidente valenciano, proponer la desaparición de la Generalitat y crear un organismo que controle a quienes puedan caer en la tentación de vestirse por la patilla. Pero lejos de esto, no sólo proclaman la presunción de inocencia -a la que, por cierto, tiene todo el derecho- que negaron a otros, sino que además hablan de maquinación policial y complot gubernamental. "Cosas veredes, amigo Sancho".
Y dejo para otro día a la legión de columnistas, opinadores y charlistas que se lanzaron a condenar por adelantado a Teddy Bautista y ahora se abonan cobardemente a la teoría de la conspiración. A esto llamo yo doble rasero y falta de coherencia intelectual.
Como decían nuestro mayores, "no es lo mismo tocar, que levantarse a abrir".
Hace mucho tiempo que la presunción de inocencia se sustituyó por la de Jorge Javier Vázquez, Lidia Lozano y Belén Esteban entre otros.
ResponderEliminarDado que estas personas no hablan mucho de política, la antigua presunción de inocencia sigue siendo aplicable a los políticos, depende desde el lado que se mire.
Un político es aquel que siempre tiene razón, aquel que cunado falta el respete, insulta o demuestra su ineptitud es en realidad porque se le ha malinterpretado. Un político nunca delinque, hay una conspiración contra él.
Hay otra serie de medios, los llamados serios, que son lo a la política lo que Sálvame de Luxe “a la sociedad”.
Vivimos en un lugar donde uno de los periódicos más vendidos sigue diciendo, si ningún tipo de pudor, que los atentados del 11 M son obra de E.T.A.
Después de esto ¿alguien se sigue sorprendiendo del doble rasero y del comportamiento vergonzante de nuestros políticos?
Pero hay que tener en cuenta que hay más de diez millones de personas que les dan su apoyo en las urnas.
Lo que habría que explicarles que eso no les convierte en intocables, ni les hace estar por encima de la ley.
He dicho explicarles porque para hacérselo recordar, lo tendrían que haber sabido en algún momento.
JA
No puedo estar más de acuerdo.
ResponderEliminarSin duda, estos politicuchos se aprovechan de la poca memoria del "pueblo", de la ignorancia de quienes carecen del más mínimo sentido crítico ante la información que vomitan medios y redes sociales.
ResponderEliminarEl PP es especialista en aprovecharse de la amnesia de quienes, por ejemplo, ahora aplauden su petición de suprimir el canon digital, cuando fue precisamente el gobierno del señor Aznar quien perpetuó este sistema de compensación, extendiéndola a dispositivos de almacenamiento como CD'S o DVD's (2003).
¿Pero por qué somos los propios ciudadanos los que respaldamos a semejantes personajes? ¿Por qué los mantenemos en el poder? ¿Por qué no somos capaces de cambiar este panorama desalentador? ¿Por qué no sólo no nos revelamos ante la demagogia barata y podrida de la derechona sino que les damos cada vez más y más poder? Y es que se permiten el lujo de llevar esa falta de coherencia intelectual de la que hablas hasta límites escandalosos porque hay quienes les secundan. De hecho, decenas de miles de españoles lo hicieron el pasado 22M. E insisto: éste es, para mí un panorama DESALENTADOR.
Y sí, mejor, ya otro día hablamos de la propaganda barata de determinados grupos de comunicación...
AG