martes, 13 de julio de 2010

Robert Capa


Son casi tres centenares de fotografías en las que están retratados algunos de los momentos más dramáticos y cruciales del convulso siglo XX. Instantáneas que nos hablan de camaradería, esperanzas, convicciones políticas, luchas personales, sueños de revolución, pero también de banderas rotas, sufrimientos, dolor, exilio y, por supuesto, muerte. Como la de ese miliciano abatido por las balas rebeldes en el Cerro Muriano. Icono universal que simboliza también la derrota definitiva de la Segunda República española. Imagen imborrable de nuestras memorias con la que podremos reencontrarnos, desde el 14 de julio hasta el 5 de septiembre, en la Sala Goya del Círculo de Bellas Artes de Madrid.

Aquella foto mítica lleva la firma de Robert Capa, seudónimo de un supuesto fotógrafo de guerra norteamericano tras el que se ocultaban Gerda Taro y su compañero Endre Friedman. Ambos cubrieron como fotoperiodistas la Guerra Civil, de la que nos dejaron una colección de testimonios gráficos que destilan una gran profesionalidad, así como un claro compromiso con la causa republicana. Tras la accidental muerte de Gerda, arrollada por un tanque durante la batalla de Brunete en 1937, Friedman tomará el testigo en solitario de aquel nombre falso, utilizado para conseguir vender con mayor facilidad sus trabajos, y con el tiempo se convertirá en el más importante y famoso de los fotógrafos de guerra. Como a Gerda, la muerte lo sorprende en lo que parecía ser su territorio natural: los escenarios bélicos. Una mina estalla a su paso en Thei Binh, Indochina, cuando acompañaba a una patrulla francesa. Corría la madrugada del 25 de mayo de 1954.

No importa que muchas de las imágenes expuestas -se incluyen algunas inéditas hasta la fecha- las hayamos visto reproducidas cientos, miles de veces. El tiempo ha quedado congelado, con toda su crudeza, en los rostros de los milicianos convencidos de la victoria, en esos marineros que tratan de divertirse en un momento de pausa en el combate, en las miradas de terror ante la proximidad del bombardeo o en las interminables hileras de derrotados que se encaminan hacia el exilio. Ellos son los verdaderos protagonistas de esta doble muestra: Gerda Taro / This is War! Robert Capa at Work (¡Esto es la guerra! Robert Capa en acción).


4 comentarios:

  1. Antonio, porfavortelopido!
    Deja la crónica necrológica de una vez.
    No vale que acudas a ella desde posiciones indirectas (futbolistas muertos, esplédidos retratos de muertos...) ¿Es que no hay nada en este terrenal mundo que te interese?

    Desde el aprecio absoluto y la abnegada admiración literaria.

    Lucía

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  2. Magnífica oportunidad para dedicar una tarde a un paseo por un Madrid de foto. En la sede de la Comunidad de Madrid, en la Puerta del Sol, está la exposición de fotografías periodísticas, con imágenes - sin duda -diferentes de esta ciudad...Clara Neila

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  3. Siempre es bueno acudir al pasado con el fin de entender un poco más el presente. De todas formas, en la actualidad podemos disfrutar de excelentes fotógrafos a los que a veces tapan los pasados y pesados, sin tener que remontarnos al mítico "Sicilia. 1955..." de Sophie de 'Las Chicas de Oro'. Y no me refiero a las del Interviu de esta semana...
    SM

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  4. En las imágenes de cualquier tiempo pasado sólo hay un reflejo de las vidas de otros, del dolor, pero también de una historia que debe enseñarnos que, por encima de todo, somos personas, por encima de ideologías. Ojalá cada mañana nos levantáramos sabiendo que estamos de paso, de paso... con la única misión de intentar hacer el bien en esta tierra.

    Carlos Ortiz

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